Junto con el inicio de clases del segundo semestre, nuestro programa de Magíster en Ciencia Política organizó la Charla Magistral "Competitividad a través de la Seguridad: Introduciendo Regulaciones al Comercio Estratégico en Chile”, que contó con la participación de Juan Pablo Rosso (Ministerio de Relaciones Exteriores), Camila Hernández Sánchez (Agencia Nacional de Inteligencia) y Carolina Calvo (Ministerio de Economía).
Las exposiciones comenzaron con Juan Pablo Rosso, asesor de la Dirección de Seguridad Internacional y Humana en el Ministerio de Relaciones Exteriores, que abordó el comercio estratégico, sus fundamentos políticos y legales, y la importancia de su regulación.
“El comercio estratégico es el intercambio comercial o no comercial entre países entidades y personas de las tecnologías necesarias para producir y utilizar armas convencionales y de destrucción masiva (armas nucleares, biológicas, químicas y radiológicas)”, señaló.
Argumentó que la regulación de los materiales que se utilizan para la fabricación de armas es una obligación y una necesidad: “Chile considera que la proliferación de armas es una amenaza a su seguridad nacional, a la paz y estabilidad nacional y a la seguridad humana”, indicó.
Detalló que, si bien, existen leyes en Chile que se enfocan en la seguridad nacional, como la ley de control de armas, la ley que regula la comisión chilena de energía nuclear, y la ley de seguridad nacional, estas no se preocupan del ámbito exterior. Por eso es necesario la ley de comercio estratégico que “regula principalmente tecnología que en sí no es letal, su peligro radica que en las manos equivocadas pueden servir para fabricar armas”, agregó.
Juan Pablo Rosso enumeró los tratados universales en los que Chile participa con respecto al control de armas, en la que destaca la resolución 1540, “cuyo objetivo es que grupos terroristas no accedan a armas de destrucción masiva, sus sistemas vectores y sus materiales conexos (materiales de uso dual que tienen aplicaciones civiles o militares y se utilizan para armas estas armas)”.
Terminó su ponencia afirmando que Chile está muy atrasado en esta materia: “Nosotros estamos trabajando en un proyecto de ley que está en la ultima etapa de evaluación del gobierno, que nos permitirá no solamente dejar de estar en el incumplimiento de obligaciones internacionales, sino que también nivelar los estándares de seguridad de nuestra economía con el resto de la OCDE”.
Las exposiciones continuaron con Camila Hernández, especialista en áreas de análisis de conflicto, seguridad internacional y terrorismo y no proliferación, desempeñándose en la actualidad en la Agencia Nacional de Inteligencia. Su ponencia se centró en explicar qué es la proliferación, su amenaza, el rol de nuestro país y cuáles son las herramientas para prevenir la proliferación de armas de destrucción masiva.
“La proliferación es la propagación de armas de destrucción masiva. También incluyen armas convencionales y los bienes de uso dual. El estudio de la no proliferación tiene como objetivo prevenir la propagación de ciertos tipos de armas a Estados o agentes estatales indebidos, y evitar acumulaciones desestabilizadoras en el sistema internacional”, señaló.
Detalló que actualmente hay 5 Estados poseedores de armas de destrucción masiva: India, Pakistán, Israel, Sudán del Sur y Corea del Norte; de ahí la importancia de considerar a la proliferación una de las principales amenazas de la seguridad internacional, no solo por los servicios de inteligencia, sino también por ONU.
“Se evidencia una creciente actividad de los actores no estatales que están buscando adquirir este tipo de mercancías, no pueden producir estos bienes localmente y los buscan en el mercado internacional. Utilizan métodos encubiertos para adquirirlos y debido a que la naturaleza de estos bienes es industrial, es difícil detectarlo porque casi siempre es legítimo y utilizan métodos encubiertos con intermediarios, proveedores, empresas de fachadas (…) la mayoría de sus acciones son legítimas”, advirtió.
Camila Hernández también afirmó que Chile debe actuar porque es una obligación salvaguardar la seguridad en la nación y para prevenir que mercancías sensibles exportadas desde Chile puedan servir para instigación de conflicto armado.
Finalmente fue el turno de Carolina Calvo, Coordinadora de Estudios en el Ministerio de Economía, quien explicó el proyecto de ley que se está trabajando, el cual regula el comercio de materiales de uso dual y de defensa.
La comisión de este proyecto la integran 7 ministerios: Ministerio del Interior y Seguridad Pública, Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Defensa Nacional, Ministerio de Hacienda, Ministerio de Economía, Ministerio de salud y el Ministerio de Energía.
Camila Hernández, precisó que este proyecto de ley consiste en que “las empresas deberán solicitar una licencia a través de un sistema. La comisión sesiona y ve si le dan o no la licencia y por cuánto tiempo.
Añadió que es muy difícil determinar el impacto económico, pero que “de todas las exportaciones que se hacen en Chile, entre un 1 y 5 por ciento son productos que deberían pedir licencia. No es un gran porcentaje de empresas”, finalizó.
Como conclusión de la actividad la jefa de programa del Magíster (i), profesora Julieta Suárez-Cao, dio espacio a preguntas de los asistentes, tanto profesores como estudiantes, y los invitó para las nuevas charlas magistrales que se ofrecerán durante el semestre.
